4.0 El Ausf A
Su producción comenzó en agosto de 1943. Inicialmente, la principal diferencia respecto al Ausf D estaba en el mecanismo de movimiento de la torre, que fue modificado de forma que la velocidad de giro variaba en función del régimen del motor, lo que permitía mayor velocidad de giro y por tanto una más rápida adquisición del blanco por el tirador. A 2.500 rpm hacía un giro completo en 17/18 segundos según fuera el giro a derecha o izquierda; a 1000 rpm el tiempo era de 92/93 segundos. También el mecanismo de elevación del cañón fue simplificado (la elevación máxima del cañón pasó de 20º a 18º). Asimismo la cúpula del jefe de carro se sustituyó por otra troncocónica de fundición dotada con siete periscopios que podían bajarse cuando no se usaban, y se añadió un periscopio de visión fijo para el cargador en el lado derecho del techo de la torre, en posición oblicua.
Durante la producción del Ausf A se introdujeron una serie de cambios: Se suprimió el portillo de comunicaciones en el lateral izquierdo de la torre; desde diciembre de 1943, el visor de tiro pasó a ser un TZF 12a monocular; en el casco, se sustituyó la abertura para la ametralladora por un montaje de bola con visor (Kuegelblende 80) y se suprimió el periscopio de visión frontal del radiooperador; se instaló un arma de defensa cercana (Nahverteidigungswaffe), montada interiormente en el extremo posterior derecho del techo de la torre y que era un lanzagranadas giratorio de calibre 26 mm, suprimiéndose los portillos de pistola laterales y trasero. Se añadieron dos conductos de refrigeración junto al tubo de escape izquierdo del motor.
Se produjeron en total 2200 Panther Ausf A hasta julio de 1944.
Un Panther Ausf A. Se aprecia el revestimiento de Zimmerit, así
como el montaje de bola de la ametralladora del casco
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5.0 El Ausf G
Fu el modelo más producido: 2953 ejemplares entre abril de 1944 y mayo
de 1945. En él se introdujeron una serie de modificaciones como consecuencia
de la experiencia operacional, y otras encaminadas a simplificar, abaratar y
acelerar su construcción. Se eliminó el equipo y la capacidad
de vadeo profundo hasta 4 metros. Los laterales superiores del casco pasaron
a hacerse con una única plancha continua (sin el extremo posterior vertical
de los Ausf D y A) y se incrementó a 50 mm el grosor de los mismos, reduciéndose
a 60º su inclinación, lo que aumentó el espacio interno y
la capacidad de almacenamiento de munición (82 proyectiles para el cañón
frente a los 79 de los modelos anteriores). En el frontal del casco se suprimió
el portillo de visión del conductor, sustituyéndose el periscopio
del techo del casco por otro giratorio de mayor tamaño y suprimiéndose
el situado a la izquierda en posición oblicua. La cubierta del casco
incrementó su blindaje a 30 mm en la sección delantera (hasta
el borde delantero de las escotillas) para mejorar la protección y proporcionar
una base más fuerte al nuevo periscopio. Las escotillas del conductor
y del radiooperador pasaron a ser abisagradas (con resortes para facilitar su
apertura) en lugar de pivotantes como en los Ausf D y A. Los tubos de escape
recibieron en mayo de 1944 unas guardas blindadas y apagallamas para evitar
la localización aérea. La cubierta del motor también fue
rediseñada, con nueva toma de aire de refrigeración y persianas
de escape blindadas. También, durante su periodo de producción,
se suprimieron los amortiguadores del séptimo par de ruedas. En la torre,
el blindaje frontal pasó a ser de 100 mm y su inclinación a 80º.
El peso del carro siguió siendo de 44,8 toneladas gracias a las simplificaciones
introducidas en su construcción.
Un Panther Ausf G con la torre apuntada hacia atrás. Obsérvese el mantelete del cañón
con el borde inferior recto y la plancha continua (sin el extremo posterior
vertical) del lateral del casco
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Se comprobó en combate que la parte inferior del mantelete semicilíndrico tendía a despedir hacia abajo los proyectiles disparados a corta distancia que lo alcanzaban, hacia el techo del casco sobre el puesto del conductor o del radiooperador. Para solucionarlo, desde septiembre de 1944 muchos Ausf G introdujeron el Kinnwalzenblende, una modificación en el mantelete del cañón, ahora más grueso y recto en el borde inferior. Anteriormente, las tripulaciones solucionaban este inconveniente fijando eslabones de cadena de repuesto en dicha posición.
Una pequeña serie de 24 ejemplares, producida por MAN en septiembre de 1944, fue equipada con las ruedas elásticas de acero de 800 mm de diámetro con acolchado interior de caucho (en vez de exterior) que se querían estandarizar para todos los carros de nueva producción y que equipaban al Tiger II y a los últimos ejemplares del Tiger I. Esto incrementaba el peso del carro hasta las 46,5 toneladas.
En octubre de 1944 se le dotó de un sistema de calefacción que
tomaba aire caliente expulsado por el ventilador izquierdo, y que sobresalía
de la cubierta trasera del casco.
Un Panther Ausf G con las ruedas elásticas de acero (sin acolchado
exterior de caucho) de 800 mm
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A finales de 1944 algunos ejemplares recibieron el equipo de visión nocturna
por infrarrojos
FG 1250,
con visor y proyector montados en un anillo giratorio
en el interior del borde superior de la cúpula del jefe de carro, siendo
el primer carro de combate de la historia en contar con dicho sistema de visión.
Un generador GC 400 proporcionaba la energía para el equipo. Una banda
de acero, insertada a través de una abertura en el techo de la torre,
conectaba el periscopio de infrarrojos con un dispositivo que detectaba los
cambios de elevación del cañón. Este equipo era demasiado
vulnerable y tenía poco alcance, por lo que se empleó como alternativa
una fuente indirecta de luz infrarroja más grande y de mayor alcance
instalada a bordo de un semioruga
SdKfz 251/2 Uhu (Búho).
Panther Ausf G con el equipo de visión nocturna por infrarrojos
FG 1250 en la cúpula. Obsérvese la ausencia del portillo de visión
del conductor en el frontal superior del casco, característica del Ausf
G
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6.0 En combate
A diferencia del Tiger, que sólo era utilizado por Schwere Heeres Panzer Abteilung (batallones independientes de carros pesados bajo mando directo de los cuarteles generales de los cuerpos de ejército) y excepcionalmente por algunas divisiones de élite, el Panther debía de ser el carro de combate estándar de las divisiones Panzer. Los planes iniciales eran equipar la totalidad de las divisiones únicamente con carros Panther, pero la industria alemana nunca consiguió alcanzar el objetivo inicial de producción de 600 ejemplares al mes (el record de producción se alcanzó en julio de 1944 con 380), por lo que la escasez de equipo era crónica en la Panzerwaffe. Cada división Panzer debía disponer, en 1943, de un regimiento de carros formado por dos batallones, uno con 51 Panther y otro con 52 Panzer IV, pero debido al citado problema muy pocas divisiones alcanzaban esos efectivos teóricos, salvo ocasiones especiales o unidades de élite. Por ello y por la mayor fiabilidad y facilidad de mantenimiento, menor costo y mejoras del armamento del Panzer IV, el Panther nunca sustituyó completamente a su antecesor, que se siguió fabricando hasta cerca del final de la guerra.
El bautismo de fuego fue en Kursk, la mayor batalla de carros de combate de
la historia. La operación Zitadelle (Ciudadela) fue retrasada hasta el
4 de julio de 1943. Estaba previsto iniciarla el 15 de mayo pero Hitler insistió
en que para esa fecha debía disponerse de 250 Panther en servicio (lo
que era imposible), confiándose en que desempeñaran un papel decisivo.
Los 250 Panther Ausf D que participaron en la operación estaban principalmente
encuadrados en la 10ª Brigada Panzer, una formación creada ad hoc
formada por dos batallones: el 51º y el 52º con 96 carros cada uno.
También la división Grossdeutschland y las divisiones de las SS
Leibstandarte y Das Reich contaron con algunos Panther para esta acción.
El debut del Panther fue desastroso: lejos de ser el arma decisiva que se esperaba
y para cuya disponibilidad se había retrasado el comienzo de la ofensiva
de Kursk, sufrió más bajas por fallos mecánicos que por
la acción del enemigo. El primer día de batalla, entre averías
y pérdidas en combate, sólo 40 de los 250 Panther iniciales estaban
en condiciones de seguir operando. El Coronel general Heinz Guderian, contrario
a que el Panther entrase en combate tan pronto como pretendía Hitler,
comentó sobre su funcionamiento en combate en Kursk: "…ardían
con demasiada facilidad, los sistemas de combustible y aceite estaban insuficientemente
protegidos, y las tripulaciones estaban perdidas debido a la falta de entrenamiento."
Sin embargo consideraba que el blindaje frontal y la potencia de fuego eran
adecuados.
Soldados soviéticos examinan los restos de un Panther destruido en la
batalla de Kursk
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El principal defecto que se le achaca al Panther es su escasa fiabilidad mecánica y la necesidad de un constante y cuidadoso mantenimiento, que redundaba en una baja disponibilidad. No obstante, muchos de los problemas automotrices eran debidos al escaso rodaje debido al rápido desarrollo y prematura entrada en servicio del carro. Pero una vez corregidos en su mayor parte los defectos encontrados inicialmente, el Panther fue un carro formidable, siempre y cuando recibiera un mantenimiento cuidadoso. Prueba de sus prestaciones y del impacto que para el Ejército Rojo supuso su aparición en la batalla de Kursk es el que lo creyeran en principio armado de un cañón de 88 mm como el Tiger I, y de que se informara de bajas en combate causadas por los Panther a distancias de más de 2000 metros.
El Panther entró en servicio en la segunda mitad de 1943, es decir, el momento de transición en la Segunda Guerra Mundial marcado, entre otros acontecimientos como el desembarco angloamericano en Sicilia, por la derrota en la batalla de Kursk, que supuso para Alemania la pérdida de la iniciativa estratégica en el frente oriental por las fuertes pérdidas sufridas por la Panzerwaffe, y que la industria alemana era incapaz de compensar. Más pesado, complejo y con superiores necesidades de mantenimiento que los modelos de carros anteriores, con el Panther hubieran sido imposibles los rápidos avances de la Blitzkrieg, pero perdida la iniciativa estratégica y enfrentada a fuerzas superiores en número, la Panzerwaffe, arma ofensiva por excelencia, pasó a desempeñar un papel defensivo como fuerza de contraataque y contención, papel para el que el Panther era más adecuado por su mejor protección y potencia de fuego. Las Panzerdivissionen se movían de un lugar a otro del frente para contener las penetraciones enemigas o socorrer a las fuerzas aisladas por aquellas, hasta el punto de que llegaron a formarse unidades especializadas en estos cometidos (conocidas coloquialmente como Feuerwher, brigadas de bomberos), como el Schwere Panzer Regiment Bäke (Regimiento acorazado pesado Bäke, en honor a su jefe el Mayor Dr. Franz Bäke), que contaba con un batallón de Tiger con 34 carros y otro de Panther con 46, así como batallones de infantería, artillería autopropulsada e ingenieros. Durante cinco días en enero de 1944 esta unidad libró duros combates en Balabanovka, al sur de Ucrania, informando de la destrucción de 267 carros soviéticos contra la pérdida de tan solo un Tiger y 4 Panther.
El blindaje lateral (de sólo 40 mm) fue causa de aprensión durante toda la trayectoria del Panther e influyó en las tácticas de empleo. Se recomendaba a los jefes de regimiento que conservaran una parte de sus fuerzas en reserva, a unos 1000 metros por detrás de la fuerza principal, para responder a ataques que amenazaran los flancos de sus formaciones de Panther, que normalmente encabezaban los ataques. Tarea de protección que solía encomendarse a los Panzer IV. A esta formación se la denominaba panzerglocke (campana de carros): los Panther iban en vanguardia, flanqueados a derecha e izquierda por los Panzer IV, formando un amplio arco, inmediatamente detrás del cual se situaba el comandante de la unidad, los observadores de las armas de apoyo y los ingenieros.
En Panther se ganó el aprecio de sus tripulaciones. El teniente Berger, de la división de élite Grossdeutschland, dijo: “Nos alcanzaron tres veces. Debo mi vida al Panther”. Respecto a la potencia de fuego, dijo que “A alcances de hasta mil metros contamos un 90% de impactos. Normalmente, un impacto suele resultar en la destrucción de un vehículo enemigo, incluso carros pesados Stalin”.