SISTEMAS ANTISATELITE
Uno de los principales objetivos de las fuerzas militares es poder ejercer su capacidad en todos los medios posibles y el espacio exterior no iba a ser menos. Desde antes de la época del Sputnik ya se concebía el uso del espacio con fines militares. Con la capacidad de poder poner objetos en orbita terrestre los primeros en llegar fueron los satélites espías. Discoverer, Agena-Midas, Cosmos-4, Big-Bird y KH-11empezaron a poblar las orbitas terrestres. Espías que no podían ser detenidos, encarcelados ni derribados, sabían que estaban ahí fotografiando la superficie con resoluciones cada vez mayores, pero poco más podían hacer. Después Estados Unidos elucubró con la capacidad de usar el shuttle como bombardero cuando el 28 de abril de 1985 el transbordador espacial Challenger describió una orbita fuertemente inclinada que le conducía a sobrevolar Rusia, detectando los radares soviéticos que descendía de altura sobre la trayectoria balística de Moscú. No hacer algo al respecto seria como permitir que el enemigo tomase ciertos sectores de territorio ignorándolos. De ahí surgieron diferentes proyectos para acabar con la amenaza que venia de “arriba”. Muchos de ellos se iniciaron con la SDI (Strategic Defense Initiative, Iniciativa de defensa estratégica, más conocida como “Guerra de las galaxias”) del presidente Ronald Reagan. Respecto al lado ruso, el secretismo que tanto les caracteriza no permite que se disfrute de demasiada información respecto al tema.
ALMV (Estados Unidos, cancelado)
Aún estando cancelado el ALMV (Air-Launched Miniature Vehicle,
Vehículo en miniatura aero-lanzado) merece una mención
en este articulo por ser de los más famosos.
Su configuración consistía en un misil de dos etapas
transportado por un F-15 (Apodado Satellite Killer). Una vez detectado
el satélite, el F-15 aceleraba hasta la vertical, lanzando
el ALMV. Ya en órbita se desprende el MHV (Miniature Homing
Vehicle, vehículo en miniatura guiado) que es un objeto
sólido con 64 microcohétes de encendido único
que lo impulsan a una trayectoria contra el satélite a
destruir que queda destrozado por la energía cinética
del impacto. Su cancelación se debió a la aparición
de problemas en el sistema de detección del blanco.
KE ASAT (Estados Unidos)
El KE ASAT (Kinetic Energy Anti-Satellite, Anti-satélite
de energía cinética) es una evolución del ALMV.
El programa, que corre a cargo de la Boeing, pretende alcanzar un
sistema anti-satélite totalmente integrado. A diferencia
de su predecesor, este es lanzado desde un misil Minuteman con base
en tierra. Otra novedad es que para garantizar su efectividad, este
posee una gran pantalla que eleva a cotas muy fiables las posibilidades
de impacto. Su sistema de funcionamiento consistiría en ser
lanzado (Únicamente bajo orden del Comando nacional) en el
momento que el satélite hostil entrase dentro del rango del
KE ASAT y cargando previamente los datos exactos de su localización
y trayectoria. Una vez en orbita, el KKV (Kinetic Kill Vehicle,
vehículo destructor de energía cinética) se
desprende de la última fase del cohete, despliega la pantalla
e inicia las maniobras necesarias de acercamiento al objetivo (mediante
sistema de autoguía) para estrellarse con el.
El desarrollo de este sistema ha tenido un coste relativamente
bajo de solo 205 millones de dólares ya que usó
mucha de la tecnología existente.
Actualmente el KE ASAT ha sido testado en diferentes situaciones
con bastante éxito.
Otras posibilidades de sistemas ASAT estadounidenses comprendían el uso de rayos láser, haces de microondas, y otras longitudes de onda del espectro electromagnético con el fin de causar suficientes daños al satélite de una forma más económica y efectiva. Actualmente se trabaja en diferentes proyectos. Respecto a los sistemas anti-satélite rusos como ya comenté, no existe demasiada información. Lo poco que se filtra habla de misiles ASAT aerotransportados como el ALMV que en este caso serian lanzados desde MiG-31 Foxhound modificados y que portarían una cabeza nuclear. También parece ser que están interesados en los sistemas láser. La mayoría de esta información se comenzó a filtrar a partir de los años 91/92 con el cambio de sistema político y aún así es muy escasa. Antes de esto se pensaba (Y se piensa) que el principal sistema soviético ASAT era uno desarrollado a partir del misil ABM (Anti Ballistic Missile, misil anti balístico) Galosh ABM-1 que también destruiría el satélite mediante una explosión.
SUPERCAVITACION
El torpedo ruso BA-111 Shkval de supercavitación (Rusia)
Diagrama del torpedo Shkval |
Actualmente los torpedos convencionales raramente operan a más
de 50 nudos (92.6 Km/h) ya que por un lado los sistemas de impulsión
tradicionales no permiten más velocidad y por otro está
que el agua ejerce una enorme fricción.
Desde los años 60 del pasado siglo se está investigando
como superar esta limitación ante el encargo de las autoridades
rusas al instituto NII-24 y al diseñador Mikhail Merkulov
de desarrollar un torpedo de alta velocidad, descubrieendose la
solución en el principio físico de la cavitación.
Este principio consiste en los cambios de presión que
produce el movimiento de una hélice bajo el agua. Cuando
un aspa de la hélice desplaza cierta cantidad de agua hacia
atrás, esta aumenta de presión, mientras que la
zona de la que fue desplazada (delante de la hélice) disminuye
de presión y se va llenando de nuevo. Si ahora aumentamos
la velocidad de rotación el efecto es más drástico,
tanto que al vacío formado no le da tiempo a llenarse de
agua y siguiendo esta los principios de la termodinámica
se transformará en vapor a causa de la baja presión.
Hay que tener en cuenta que con una misma hélice (El diseño
influye) las rotaciones por minuto para conseguir un mismo efecto
dependerá de la presión y por tanto de la profundidad.
Es de ahí de de donde surgen las estelas de burbujas de
los torpedos y submarinos, de hecho los submarinos evitan a toda
costa producirlas variando la velocidad de sus hélices
en base a la profundidad a la que operen ya que este efecto produce
mucho ruido y los hace fácilmente detectables al sónar
enemigo. En esta explicación la hélice es un mero
ejemplo. Para producir cavitacion basta con lograr que un objeto
en movimiento bajo el agua logre crear presiones suficientemente
bajas como para que se produzca la evaporación del agua.
Si este efecto se lleva al extremo aumentando la velocidad del
objeto, se produce una gran y única burbuja de mayor o
menor tamaño y cuya forma dependerá de la del objeto
que la produce. En el caso de los torpedos se suele usar una punta
roma, dando lugar a una burbuja elíptica. Esto es lo que
se conoce como supercavitación.
Con este sistema se logra subsanar el problema de la fricción
ya que el torpedo viaja en una burbuja de gas. En complemento,
el sistema tradicional de propulsión es sustituido por
un motor de cohete que dota al conjunto de velocidades que rondan
los 200 nudos (370 Km/h). Concretamente el Shkval (Squall en código
OTAN, chubasco) usa este sistema siendo lanzado por un tubo estándar
de 533 mm a una velocidad de 50 nudos y activa su cohete iniciando
la supercavitación. Su mayor inconveniente es su alcance,
de tan solo 6900 metros.
|
Conviene decir que aunque ambos sistemas no son demasiado precisos (Aún para la velocidad alcanzada por el torpedo que deja poco margen de huida al objetivo) esto es subsanado por la capacidad de destrucción de su cabeza de guerra, consistente en una ojiva nuclear táctica. Los prototipos mejorados más recientes (1998 y posteriores) incorporan un sistema de guía, lo que les dota de una precisión muy superior a la de sus predecesores evitando así el uso de una cabeza nuclear que restringiría notablemente sus usos. De hecho en estos modelos se usa una cabeza de guerra convencional no nuclear.
Por otro lado, aunque por ahora solo se aplica en torpedos, a
la supercavitación se le prevén multitud de aplicaciones.
Desde submarinos enteros a proyectiles de cañón
disparados desde helicóptero con el objetivo de neutralizar
minas submarinas de una forma segura y barata.
Para finalizar comentar que, de forma totalmente extraoficial, se rumorea que el fatídico accidente del submarino ruso clase Oscar II, K-141 Kursk en el Mar de Barents en agosto del 2000 de se debió a un fallo de uno de estos torpedos que provoco una explosión. No obstante, según el informe redactado a partir de la investigación y publicado por la Rossíiskaya Gazeta (Diario oficial del gobierno ruso) el accidente se debió a una serie de negligencias en cadena que finalizó con una fuga de peróxido de hidrogeno que entro en contacto con metano, detonando. Posiblemente ese peróxido de hidrogeno proviniese del sistema de propulsión de uno de los torpedos.